La geometría de los tríos
Barbarella
La semana que viene tengo un evento, uno cultural no penséis mal, y mirando el armario me vino a la cabeza eso de «no tengo nada para ponerme». Tenía la excusa perfecta para visitar a «mi modista«, me conoce, sabe lo que me gusta y lo que me favorece. Nadie hilvana mis curvas con tanto mimo, entre puntada y puntada me contó que una amiga suya quería dar vidilla a su matrimonio probando una de las fantasías de su marido, hacer un trío. Su marido quería que fuera con dos mujeres, eso de que existiera la posibilidad de que otro tío se rozara con él le producía rechazo, ella no estaba muy convencida pero no quería que fuera con cualquier mujer, tenía que ser alguien con quien tuviera algún tipo de afecto, y pensó en la modista.
Es curioso, de todas las combinaciones de los tríos, gran número de masculinos suelen fantasear más con un trío de dos mujeres y un hombre. Una vez leí que la razón de esta preferencia era que el instinto de supervivencia generaba competitividad entre los masculinos por ser los primeros en llegar al objetivo. Una teoría como otra cualquiera, el caso es que uno de los primeros temas que te tienes que plantear si quieres probar un trío es cómo llevas eso de la bisexualidad, para establecer los límites. Lo sé utilizar el concepto de límite puede chocar con un pensamiento liberal de los tríos, pero para nada, la esencia de un trío es que todos los participantes disfruten, descartando aquellas prácticas que no sean del gusto de alguno de ellos.
Otro punto importante a tener en cuenta es con quién hacer un trío. La amiga de mi modista lo tiene claro tiene que haber amistad, personalmente me parece muy arriesgado para la amistad, la relación puede cambiar, tanto entre amigas como entre el marido y la amiga. Todo tiene sus ventajas e inconvenientes, con un desconocido no se puede romper una amistad inexistente, pero también la falta de afinidad puede estropear un prometedor trío. Lo más importante es estar seguro de querer hacerlo, y de que quieras hacerlo con todos los participantes. Eso de, «bueno vale, el otro/a no me gusta pero lo hago por ti» no sirve.
En cuanto a los tipos, hay muchas clasificaciones, por sexo de los participantes HMH, MHM, MMM, HHH, MHH, por el grado de actividad e inactividad de los participantes… Yo voy a compartir una que es gráfica sin ser literal, los tipos de los tríos por su geometría. No es la mejor clasificación pero es la que más gracia me hace.
– Trío isosceles: El masculino es pasivo, espera tumbado las atenciones de dos féminas que harán realidad ese sueño de una felación a doble boca. A partir de aquí cualquier combinación que no implique mucho esfuerzo por parte del masculino es factible. Desde el «ponte encima» a turnos al «yo me tumbo y ya vosotras al lío»
– Trío Rentángulo: La bella Isosceles cual reina del universo del placer disfruta de las atenciones de un par de catetos. No voy a explicar las razones trigonométricas por las cuáles la hipotenusa ejerce tal poder de dominación sobre sus catetos. Ellos están disfrutando del cuerpo de una diosa a la que adoran .Una de sus propiedades es que el cuadrado del placer de la hipotenusa es igual a la suma de los cuadrados del placer de los catetos.
– Trío obtusángulo: Una pareja opta por añadir un masculino a su combinación, un masculino escogido por la chica y su novio es bastante reacio a participar activa o pasivamente con el masculino. Su primera reacción es limitarse a mirar a su chica y al invitado, pero lo descarta porque lo del voyerismo sin disgustarle le sabe a poco. Se une al trío activamente estableciendo sus límites pero cada vez que siente el aliento del masculino se pone nervioso y empieza a cambiar de postura intentando mantener alejado de su culo al otro masculino. Mientras tanto a la chica se le pasan las ganas y se pone a pensar en la lista de la compra.
– Trío equilátero: Aquí tenemos uno de los tríos más eficaces y equilibrados. Un «yo contigo, tú con él» en bucle. Una especie de encuentro cósmico de afinidades que flotan en el aire. Un «todos con todos» mucho más legendario el «Uno para todos» de los tres mosqueteros. ¿En cuanto al sexo de los participantes? Qué más da si todo fluye de forma natural.
Ya os contaré qué tal el trío de mi modista, me gustaría verlo por un agujerito…