De follamigo a habitante de minizoo
Barbarella
Ultimamente los habitantes de mi minizoo me preguntan qué son ellos para mí, y he preparado este glosario para aclarar los diferentes conceptos.
Amigo: Me gusta tener amigos masculinos, me entiendo bien, me dan otra perspectiva y tienen un sentido de la amistad sin prestamismos que me gusta. Tengo amigas que no creen en este concepto, que al final siempre una de las partes acaba atraída por la otra, lo que no significa que exista correspondencia, todo lo contrario. La verdad es que tiene sentido, es fácil que te guste un amigo, pero tampoco se puede generalizar, me niego a creer que no se pueda mantener una amistad sin atracción. Aunque si es cierto que en algunos casos, el acercamiento no es trivial ni desinteresado.
Pagafantas: Son amigos desinteresados de los cuáles algunas féminas se aprovecha. Terminan acompañando a la chica en cuestión a todos esos sitios dónde ni el amante ni el novio quieren ir. El pagafantas suele tener un interés sentimental en la chica, algunos sienten un inmenso amor platónico, e intentan subir puestos en el ranking de su escogida. Ella en cambio nunca les pasará a otro escalón, un pagafantas es y será siempre un pagafantas.
Amigo con derecho a roce: A mi este tipo me gusta mucho, es un amigo que vale para todo, lo mismo sirve para compartir tu vida, tus inquietudes y preocupaciones que para alegrarte la vida. Lo mismo te da un abrazo que un revolcón, todo ventajas.
Follamigo: Este concepto se puse de moda hace unos años. ¿Pero qué diferencia hay entre amigo con derecho a roce y follamigo? Supuestamente el follamigo es un amigo con el que tienes tanta complicidad como atracción. Te entiendes en la vida y en la cama, lo que no es tan fácil como parece, y al final llegas al acuerdo que para no perder el tiempo buscando por ahí, y matas dos pájaros de un tiro. Todo esto sin compromiso. En el caso de amigo con derecho a roce, el roce es más circunstancial, si se da, pues no pasa nada, y si no tampoco sigue siendo una “amistad con derecho a roce” y los follamigos, directamente cuando quedan, acuerdan un full pack, en el que charlan, comparten y follan sí o sí, siendo la última parte muy importante, y si no se da, ya dejas de ser follamigo.
Amante: Me encanta esta palabra, lo curioso es que aunque el termino tenga su raíz en la palabra amor, no significa que exista un vínculo amoroso. Simplemente es el concepto antiguo para denominar a alguien con quien te acuestas. Desaparece el atributo de amistad, no son amigos ni nunca lo serán. Los amantes quedan para lo que quedan, y la amistad brilla por su ausencia. En cuanto al amor, la mayoría de las veces, el amor se lo queda la buena mujer que espera en casa sin saber de las andadas de su pareja. Existen muchas historias que narran como la fémina termina enamorándose del masculino, y que este termina volviendo a su hogar, bien porque le han pillado y ha sido perdonado, o porque no quiere complicaciones, y se busca otras maneras de satisfacer su deseo sexual sin que le quiten el sueño. Si hay tanta literatura sobre el tema, entiendo que se darán muchos casos. En caso de duda, si te ves vulnerable, ni te acerques ni lo pruebes XDXDXD
Amante sin obligaciones: Para mí que es lo mismo que amante, pero por si acaso le ponen esta coletilla, una forma de preaviso. No te emociones no te debo nada, ni siquiera un buen encuentro.
Habitante de minizoo: No hay amistad, ni amor, ni desamor, te cuidaré y daré mimos. El objetivo es darnos el máximo placer sin hacer sufrir. No tienes que ser un habitante de un minizoo para siempre, ni tampoco un habitante exclusivo, puedes escoger otros mundos, pero en mi minizoo no te faltarán experiencias y aventuras, y si te portas bien, puedes llegar a conocer a otros habitantes.
Foto de portada: Enrique Lin