Hola compañeros del averno y almas humanas en general, los diablos y diablesas devilbaínas somos ya ampliamente conocidos y deseados en ese vuestro mundo mortal.

En el infierno, un día cualquiera del presente mes, y de un año cercano. Querido Compromiso: Llevo meses intentando hablar contigo, conocerte, pero me resultas esquivo y huidizo.

Autor: Clara la jubilada Después de un matrimonio de casi 20 años, y un noviazgo de 18, puedo afirmar que la rutina es mortal.

La verdad es que no os entiendo. Los humanos sois los animales más absurdos del universo.

Hola mis queridos esbirros demoniacos, hoy tengo que contaros una situación agradable y gustosa, tanto que siento la necesidad de compartirla con vosotros y es que en ella hubo magia.

Hola seres infernales,  ¿qué? ¿Menuda pregunta verdad? pero venga, no me seáis tímidos, que seguro que esta pregunta ha sido planteada alguna vez, tanto en público como en privado, en cenas con colegas o en la intimidad de vuestra habitación.

Autor: Clara la jubilada Me podéis llamar rara, antigua incluso engreída, pero lo paso mal cuando yo vuelvo por la noche a casa sola, cada paso que no suena a tacones me acelera el corazón y no se me desacelera hasta que llego al portal.

-Es que de verdad, los hombres parece que sólo pensáis en sexo. -Bueno, pues parecido a vosotras. Tal vez un poco más pero estoy seguro de que no andamos tan alejados.

¿Por qué lo haces? ¿qué te lleva a forzar a una mujer a tener sexo contigo? de verdad que no lo puedo entender.

Autor: Clara la jubilada Mi hija mediana está liada con un hombre casado, no es que me guste o me disguste, lo único que me importa es que sea lo que sea que no le haga daño.

Cuando, después de años encubriendolo tontamente, acepté que realmente me gustaban las mujeres y salí del armario, quise investigar más sobre ellas. Probar, experimentar… Muchos chicos habían pasado por mis brazos y mis bajos, pero había sentido pocas mujeres.

Sí, soy mujer. Sí, estoy casada con un hombre. Sí, me atraen las mujeres.

Queridas todas: Disculpadme el tono tan serio de hoy, pero es que la cosa no es para menos. Os cuento, cuando una pareja tienen relaciones sexuales (con consentimiento), ambos acceden por voluntad propia y de igual a igual.