Degenerado de Chloé Cruchaudet
Barbarella
“Degenerado”. Con este título no pude evitarlo, tenía que leerlo; los degenerados siempre han sido unos tipos interesantes y yo tengo tanto que aprender…
Es una historia basada en hechos reales: Paul Grappe, un hombre normal que se enamoró y se casó con Louise, estaba destinado a tener una vida sencilla que se truncó con el estallido de la Primera Guerra Mundial. Tuvo que alistarse y vivir los horrores de la guerra, lo que le dejo seriamente traumatizado. Le hirieron y, aunque fue algo leve, ya no podía soportar volver al frente, por lo que decidió desertar. Fue a su casa, y tuvo que esconderse; no podía salir para evitar ser reconocido y por alguna extraña razón se le ocurrió plantarse un vestido de su mujer y salir así a la calle. Entonces fue libre…
Este parece el típico argumento de comedia tipo “con faldas y a lo loco”, pero era la vida real, en un entorno mucho menos abierto que el actual donde la homosexualidad estaba prohibida; lo de vestirse de mujer como poco era raro. Por otro lado, en tiempos de guerra surgen los mejores y peores instintos de los humanos, y de alguna forma también se hace la vista gorda.
Cuando se vestía de mujer ya no era Paul, era Suzanne, tenía una nueva personalidad que le abría un abanico de posibilidades. No es que Paul fuera homosexual, bisexual, o travesti, me niego a poner etiquetas. Cuando Paul se travestía era Suzanne, y a Suzanne le gustaba el placer en todos sus formatos y géneros. Empezó a frecuentar el Bois de Boulogne, 35 kilómetros plenos de secretos caminos donde dar rienda suelta a toda clase de fantasías. A este bosque acudían personas de alto nivel social y con buen apetito sexual, y Susanne pronto fue adquiriendo un lugar privilegiado en este nuevo entorno. A todo esto, Paul, estaba casado, y Louise su mujer tuvo que adaptarse tanto a compartir los vestidos con su marido como a asumir esta nueva sexualidad que ahora era el motor de su vida. Me pregunto cómo fue el proceso de adaptación de Louise, supongo que no fue fácil, sin duda muy interesante.
Y hasta ahí puedo contar, prefiero que lo probéis por vosotros mismos. No os voy a contar el final, pero sí puedo compartir lo que más me ha gustado y lo que he sentido.
Me he sentido identificada con la apertura de moral y su búsqueda. No tiene tabús y, partiendo de no saber nada de nada de estos temas, descubre su nueva sexualidad, más libre y plena. Somos seres sexuales, pero culturalmente nos han capado, y me gusta descubrir que, en cada época, surge algún rebelde que se rebela contra lo impuesto. Suzanne puede ser una de mis nuevas musas…
También, me ha dado mucha envidia el Bois de Boulogne en esa época. Me he imaginado las orgías improvisadas, personajes de gustos diversos y la libertad sexual que allí se practicaba. Supongo que, hoy en día, es muy complicado tener un pedacito de bosque para estos menesteres sin salir en YouTube, pero me lo anoto como posible homenaje o fantasía, el bosque de Barbarella, ummm suena muy bien XDXDXD.