El amor no duele
La Txika del Sextoki
Queridas todas, hoy no es un día cualquiera, hoy es 25 N
A veces me gustaría charlar con mi yo del pasado, aquella chica del año 2.000 a la que no le habían roto el corazón, y era bastante ingénua. Así que hoy, con vuestro permiso, voy a hablarle a mi yo de hace 16 años.
Estimada yo,
Veo que sigues como siempre, tarde o temprano te darás cuenta que ese color de pelo no te favorece, y que más temprano que tarde los pantalones verdes de campana y las art pasarán de moda (gracias a Dios). No vengo a hablarte de ropa, menos mal que con el tiempo has ido mejorando… vengo a hablarte de ti.
Quiérete mucho, muchísimo, no dejes que nadie te insulte a cambio de unas migajas de amor. Crees que es eso es normal porque no lo has visto antes pero ya verás que no es así.
No permitas que te controle, ni des explicaciones cuando él te está engañando en todo lo que te dice.
No llores, al menos, no por él, no merece la pena, ya te darás cuenta que hay cosas y personas más importantes.
No dejes en la puta vida que te ponga la mano encima, sé que dirás que ha sido algo puntual, y sé que él te prometerá cambiar. No lo hará.
No retires la denuncia, sé que tienes miedo porque la policía ha actuado de oficio y no entiendes porque está en el calabozo, y tú ante un juez quitando hierro al asunto. «Pelea domestica, es habitual…»
Sé que ahora no lo ves, y crees que estás tocando el cielo, pero estás con la persona más toxica que has conocido. Y no sólo por las marcas que te va a dejar, al final esas con el tiempo se irán, sino por todo el daño que te hará. Creerás que eres una mierda, que no vales nada y que no mereces ser feliz. ¿Sabes? Estás equivocada.
No será fácil ser feliz de nuevo, pronto te darás cuenta que no consiste en tener dinero en el banco, ni usar la talla 38, ni en tener una familia al uso. Ser feliz es tener una moneda de más en el bolsillo para un pincho de tortilla (sí, seguimos siendo unas adictas), mirarte cada día al espejo y verte estupenda, y créeme, no, lo de tener hijos con el tiempo no lo ves como una prioridad.
Ay, mi querida yo, te cuento todo esto, porque al final hay luz, porque el mundo sigue girando y tú verás si quieres seguir avanzando o quedarte dónde estás.
Spoiler: al final hiciste lo correcto y la marca que te queda en la piel te recuerda de donde vienes y hacia donde quieres ir.
Cuídate, no me gustaría escribirte de nuevo en un futuro.
Es tarde para decirme todo lo que me hubiera gustado.
Al menos llego a tiempo, para decirte que si estás en una situación parecida actúes y si ves que alguien puede estar sufriendo, ayuda.
Nos queremos vivas. Nos queremos libres.