Hoy, después de un tiempo de sequía, comienzo con una nueva sección entre mis artículos. Reviews de productos o juguetes sexuales. Comenzando por comentar la gran variedad de productos, vibradores, geles de masaje y de sabores, estimuladores varios… expresaré mi humilde y sincera opinión de los que he experimentado en propia piel.

Comenzaré hablando de los geles o aceites de sabores u olores. Por supuesto que son un juego erótico sabroso, dan vida. Son una gran excusa para un masaje y para terminar investigando el cuerpo de tu pareja sexual rincón a rincón, alejándose de la centralización de los genitales y regalándose en el pecho, los hombros, manos, dedos, vientre, piernas… y todas esas zonas más olvidadas. Hay sabores frescos y más dulzones. ¡Detalle muy importante! Asegúrate bien de que tu pareja no es hiper sensible a ciertos olores, recuerdo que a mi pareja no le gustó en absoluto el aceite de chocolate, por ejemplo. Al ponérselo en el pecho le entró el olor demasiado intenso por la nariz y le hizo toser muchísimo, lo que cortó el rollo del todo. Ahí aprendimos ambos que él es más de fresquitos. Otro consejo para evitar esto es la cantidad a usar, si es un aroma nuevo y no sabes bien cómo va a reaccionar tu pareja, comienza con muy poca cantidad, dosificando y disfrutando momento a momento. Seguro que investigando y preguntando puedes saber si tu pareja es más de dulzones o del frescor de las frutas.

En cuanto a los efectos, he probado el gel efecto calor. Sí, intensifica la sensación, pero usa mejor muy poca cantidad, para no perder del todo la sensación de la penetración con el efecto. Tengo pendiente probar el efecto frío, sé que en este caso le gustará más a mi pareja que a mí, yo soy más de calorcito, pero bueno, creo que no me importará demasiado hacer el «sacrificio». Lo divertido de estos productos también es ir probando y aprendiendo juntos, para descubrir qué efecto le gusta más a cada uno, con la comunicación que ello implica y sin tapujos. Pueden dar mucho juego a la pareja si ambos os animáis a probar y compartís experiencias. Sin duda, aumentará la complicidad entre los dos.

Variedades hay mil, velas aromáticas con cera especial que puedes esparcir por el cuerpo sin que queme. Combinaciones de efecto frío y calor. Un bote de gel de chocolate con un pincel para que vayas marcando el caminito que después quieres recorrer por el cuerpo de tu pareja. Fresa, frutas tropicales, menta fresca… y el último formato que he visto han sido unos polvitos, como una polvera de maquillaje, de sabor fresa, con la misma finalidad de cubrir el cuerpo de tu pareja para saborearlo después, y reconozco que dejan un brillo precioso en la piel, por tanto, la idea de presentarte desnuda ante tu pareja cubierta de polvito brillante rosa, y decirle que eres como un algodón de azúcar dispuesto a ser saboreado, va cobrando forma en mi cabeza. Si tienes una pareja golosa y enamorada del dulce, ¡acertarás seguro!

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Disfrutad de vuestro sentido del gusto, diabletes. ¡Lenguas activas!

Foto de portada: Kelly Rosborough