
Mirándote a las tetas con la cabeza vacía
Hombres y mujeres es obvio que somos a muchos niveles criaturas antagónicas. Aún con todo el trabajo de igualdad que se ha hecho y todo el que queda pendiente, está claro que nuestras naturalezas pueden llegar a ser muy opuestas en muchos sentidos. Complementarios dirían algunos.