Reconozco y admito que soy un desastre. Soy de las que se olvidan de las cosas con demasiada facilidad, como por ejemplo citas médicas, quedadas con amigos, o incluso cosas tan serias como una reunión,

Hola, hola, seres infernales. Hace tiempo que no escribo, pero es que he estado ocupado queriéndome un poco y queriendo al resto del mundo siempre que he podido.

Ritxard Agirre es un escritor bilbaíno que me ha sorprendido gratamente con sus novelas. La primera, Tarótico, me pareció divertida y picante.

Lo hicimos en el bar Aleatorio el 07-12-2014 un día complejo para presentar «Ábreme si me quieres conocer». La verdad es que siento que quedaron muy bien entrelazadas su voz y la mía… así que habrá que repetir. Esto es sobre todo para los que no pudieron estar aunque también para los que nos acompañaron […]

Calma, que no cunda el pánico, podéis desconectar las sirenas y decirle a los cuerpos de seguridad que ha sido una falsa alarma, que en realidad nadie está tratando de pervertir menores y hacerles caer en el pozo de la perdición sexual. ¿O tal vez sí? Jejejeje…

Esta historia comenzó la segunda vez qué salí con mi akelarre, por aquel entonces yo acababa de empezar mi aventura con Koldar y aún no recordaba mi naturaleza demoníaca.

Comenzaban mis vacaciones, unos días fuera con unas compañeras de clase. Un viajecito de dos días en barco, visitar una ciudad británica y volver. Llegamos al puerto y embarcamos. Compartía camarote con otras dos chicas de clase.

Era más fácil entonces cuando aún no había probado tu sexo y vagaba en otros cuerpos en busca de mi misma, cuando no tenía el recuerdo de nosotros como orugas bajo las sábanas. Acrílico y café en hoja de libro (expurgo) sobre lienzo 65×54. Ilustración realizada para la publicación «Esferas» (poesía erótica). Editorial Círculo rojo. […]

Que tenemos una manía y unas costumbres de lo más feas y además, absurdas. Las personas no tienen defectos ¿quién fue el primer idiota que se le ocurrió pensar en algo así?

Día 1: No podía dormir y aún era muy pronto para encaminarme al curro. Podría haber sacado de su cajita mi juguetito pero no me apetecía ese tipo de placer metálico,

Nos gusta gemir, sí, tanto en hombres como en mujeres, los gemidos le dan salsita al tema. Normalmente se asocian más con la mujer, pero chicos, vosotros también podéis gemir.

Llevo tiempo teniendo mucha curiosidad sobre este campo, pero no ha sido hasta hace poco cuando he empezado a explorar estos terrenos de forma apropiada. Iré contándoos mis apreciaciones según haga avances en la materia.