Síndrome del cojón retráctil
Dos de Corazones
Es curioso: en ocasiones sucede que te gusta una persona, la deseas, ves o al menos intuyes miradas que desnudan, surgen posibles chispas y ninguno de los dos dice nada.
Sí, a veces pasa. Es interesante cómo, en plena revolución sexual, o al menos eso es lo que desde el submundo estamos promoviendo, nos dé corte compartirnos.
Claro, me diréis, a mi no me pasa. Pues genial, enhorabuena. Pero a mi sí, y es que los viejos cánones y los clichés aprendidos en la infancia resurgen en el momento clave, haciéndote no ser natural, haciéndote pensar en pros y contras, más contras que pros, en posibles decepciones, en todo lo negativo que podría suceder; cuando lo ideal sería cambiar el chip, lo ideal sería que nos hubiesen educado en lo genial que sería si… pero no.
Y en este momento aparece el denominado Síndrome del cojón retráctil, también conocido como falta de huevos; así es, simple y llanamente.
Y vamos evolucionando y cambiando, pero cuesta; al menos a mi los cambios me cuestan pero ¿por qué os cuento esto? Claro, todo viene por una historia, me explico.
Este fin de semana tuve un gran evento, estuve rodeado de gente genial, divertida y guapa. No he de negar que le eché el ojo a una amiga, una chica atractiva que me llama la atención desde que la conozco. En fin, que después del evento, mientras tomábamos una copita, todos sentados a la mesa, ella al lado, la conversación fluía y como no, entre adultos, derivó al tema sexual.
La cosa es que nos animamos. Cómo me hubiese gustado que en algún momento nos hubiésemos mirado de esa forma felina, esa que dices, ya está; pero no, o al menos no lo noté, aunque había algo, algo percibía, algo de tensión sexual había y no arriesgué, porque apareció el síndrome del cojón retráctil y nada de nada.
Pues eso, amigos infernales, echémonos una mano entre todos, juguemos a relajarnos, a hacer evidentes nuestros deseos (siempre sin ofuscar a la otra persona), dejémonos ver, quizás así todo seria mas fácil, quizás, si nos mostramos, el síndrome no aparezca animado por las dudas y una vez bien follados seguro seremos más felices y eso hará un mundo mejor.
Siempre mis mejores deseos.