Me gustan los juegos, sí, pero un niñato que me importunaba se ha ganado su GAME OVER a pulso. Todo empezó con unas charlas que dí en la universidad, allí le conocí, un chaval moreno, alto, delgado, con pinta de no romper un plato. Mantuve el contacto con el grupo de asistentes y  de vez en cuando quedábamos para tomar una cervezas y la atracción era evidente. Por entonces el tenía novia, «quiero mucho a mi novia pero tu me pones más»…

Reconozco que él a mí también me ponía, y confesamos nuestra atracción mutua, pero no como planteárlo en serio. En un momento de debilidad un día nos besamos pero sin llegar a más, se arrepintió y decidió romper el contacto.  Un año después me mandó un wasap a las 6 de la mañana, que si estaba cerca de mi casa, que si podía subir, y me mandó una foto de su miembro erecto junto a un billete de 20 euros. Aluciné ¿un billete de 20 euros? ¿Es eso lo que cuesta? ¿Acaso me estaba vendiendo sus servicios? Resultó que había puesto el billete de 20 para que apreciara que su pene era más grande, como medida de referencia. Supongo que habrá a quien le motiva que le manden una foto de un primer plano de un  miembro pero no es mi caso, prefiero ver a qué está pegado, prefiero ver un conjunto, y si tengo que escoger un plano cuello hombro brazo pecho, aunque con  una mirada seductora me vale. Vale nos habíamos enrollado una vez sin mayores consecuencias, y sí teníamos una tensión sexual pendiente de revolver, pero ¿Hay que resolverlas todas? Le expliqué que no eran horas, además yo estaba acompañada.

Por la tarde, me mandó un wasap que si no quería nada conmigo, que estaba borracho, y que estaba empezando una relación muy especial con una chica que no quería estropear.  Que por favor no contactara con él, que quería distanciarse. Perfecto, allá cada cual con su mecanismo, bastante tengo con el mío. Total que pasó el tiempo y volvió a repetirse el numerito, estaba sola y esta vez me mandó un vídeo. Si hay algo que no soporto son los arrepentimientos reiterados, así que le preavisé que si decidíamos resolver de una vez por todas, si después se arrepentía, que ni se le ocurriera llamarme para decirme lo mucho que quería a su novia, o peor, que me echara la culpa de sus decisiones. Pero lo hizo, después de cuatro besos y sin llegar a consumar se arrepintió, me echó la culpa por aceptar la propuesta de un borracho, y delante de mis narices borró mi número.

Hace un mes, ¿Lo adivináis? Me llegó una encuadrada foto de un pene erecto junto con un billete de 20 por email  XDXDXD No es que reconociera el pene, pero supuse que era de «uno que borró mi número», y ¿Sabéis a qué hora? 7 de la mañana. En el email me decían que estaba deseando subir y empotrarme contra la pared para que descubriera su vigor. Yo estaba muy enfadada y pensé echarle la bronca, pero le  contesté «sube».  Resolvimos la tensión rapidamente y se quedó dormido en el sofá, no antes de decirme lo mucho que quería a su novia. Insisto, estaba muy enfadada, era la tercera vez que importunaba a deshora, sin respetar ni mi disponibilidad ni mis sentimientos. Cogí un rotulador negro indeleble, y le escribí en el trasero «Barbarella was here»  y de propina un dibujito de una chica. GAME OVER

No creo que el rotulador sea indeleble en piel pero imagino que para borrarlo al menos hay que molestarse en frotar, que le ayude su novia si no llega y como ya no queda tensión sexual sin resolver, a otra cosa mariposa.

Foto de portada: SuicideGirls