Yo pierdo vestido
Dos de Corazones
Hola seres infernales, hoy os voy a contar una situación que vivo muy a menudo, tal es así que no la había tenido en cuenta para contárosla, aahhh error por mi parte, mal Dos de, maaal.
Pero arreglemos el entuerto, veréis. Muchas veces en las vacaciones terrenales que suelo hacer me introduzco en cuadrillas utilizando el poder mental que tenemos los habitantes de este infierno, tal es así que la gente que me rodea me toma por uno más, como si toda la vida hubiese estado allí, eso me permite relajarme y disfrutar, pues bien, a lo que iba.
En todas las cuadrillas y conversaciones tarde o temprano se toca el tema del estilo, de la ropa, de ir guapo, que si mira ese pantalón, que si le sienta bien esa falda y así infinidad de prendas. Yo en mi intención de concienciar a vuestro mundo siempre respondo lo mismo
PRIMERO: “Yo con cualquier trapito que me ponga crujo como siempre, mucho y a veces incluso más”.
SEGUNDO: siempre sentencio “Aún así, yo pierdo vestido que le voy a hacer”.
La reacción siempre es la misma, alaaaa, fantasmaaaa, ¿dónde vas? Presumido. Si no fuese un diablo razonable y al no saber ellos quién soy me contengo ante la afrenta y no separo las cabezas de sus cuerpos, me relajo respiro y comienzo mi reflexión.
Veréis, es innegable que como cualquier animal de la naturaleza las personas buscan llamar la atención de una u otra manera, así funcionan los cortejos. El mundo animal lo tiene claro, abrir sus plumas, moverse de una forma determinada, producir sonidos estimulantes etcétera, un detalle a tener en cuenta es que los animales son listos, no venden nada que no tienen, no hay engaño, por lo tanto no hay decepción.
Pero vosotras las personas, el género humano, sois raros. Las maneras, la conversación, las miradas y gestos son básicos y en ellos sale vuestra parte primitiva, vuestra parte animal, así pues sois naturales en mayor o menor medida, en cuanto a las ropitas, bueno, está bien pero como dice la canción
“A la hora de estar desnudos a ver si os ayuda el señor Versace”
Pues sí, a esto me refiero con que pierdo vestido. Te expones, te catalogas, montas un pack, te gustas, gustas al resto, alguien decide compartirse contigo, lo paséis bien y de repente ropas fuera, almas y cuerpos desnudos, y ahora sí, ánimo peña que estáis solos en esto.
Una vez situado en este momento los miedos, los clichés y las expectativas aparecen. Esto es una constante en vuestro mundo, los demonios lo sufrimos hace ya miles de años pero hemos evolucionado y aprendido, por ello sabemos en la población infernal que todos ganamos desnudos.
¿Porqué? Fácil, por que nos conocemos, nos queremos y no nos engañamos. Yo mismo por ejemplo sé que no soy ninguna clase de Titán sexual, al menos no cuando me comparto con un humano, no lo vaya a reventar, su cuerpo no lo soportaría. Así pues me pongo en modo persona terrícola con todas sus limitaciones pero, y aquí está la cuestión, aún así, soy un amante excepcional ¿por qué?
1.- Comprendo que el sexo es mucho más que el coito, por ello me la gozo en cada una de sus fases.
2.- No me da miedo compartirme y experimentar con mis compañeros sexuales siempre manteniendo el respeto y el acuerdo entre las partes.
3.- Sé de las distintas formas en las que tenemos orgasmos, tanto ellas como ellos, así que no pretendo nada más que lo real. Con esto quiero decir que el hombre dura lo que dura y la mujer tiene sus tiempos amén de las distintas posibilidades de género con sus fascinantes peculiaridades.
4.- Me gusta tomarme mi tiempo para poder exprimir al máximo el momento y hacerlo único
5.- Compartirse, compartirse y compartirse.
Sí, lo sé, esta reflexión puede resultar simplista pero es que es así, vuestro cine humano y la literatura no nos ha ayudado mucho en este aspecto, el papel lo aguanta todo y en el cine un minuto y medio de película son aproximadamente 5 horas de rodaje con sus cortes y descansos, así que, echad la cuenta champions.
Por eso digo, conoceros, quereros, amaros y disfrutaos, entended vuestros tiempos y posibilidades, explotarlos.
Con esto me despido y recordad, empezar a entender que todos perdemos vestidos ya que ganamos enteros cuando estamos desnudos solo hay que ser uno mismo.
Espero haberos sido de ayuda, para todo lo demás Mastercard, un abrazo de Dos de Corazones, el jodido Coelho del Infierno jejej