Mil razones para follar contigo
Hieros Gamos
¿Sabéis una cosa? yo puedo llegar a estar dispuesto a tener sexo casi con cualquier mujer. Este es un tema que he comentado muchas veces y que rara vez se llega a entender, sobre todo por vosotras y sin embargo, al menos en mi cabeza, tiene mucho sentido.
Cuando lo comento se me pone de sátiro, salido y pervertido (lo cual tampoco voy a negar demasiado) pero lo que sí me molesta es que afirmen que soy poco selectivo por eso. No estoy de acuerdo en esto último y os explicaré por qué.
Aunque no me gusta esto de agrupar a las personas por sus características, en este caso voy a hacer una excepción pero agrupando a las mujeres por mi capacidad de interesarme sexualmente por ellas, hablando claro está, siempre del supuesto de encontrarnos en situación para que se den las circunstancias, es decir, solteros, sin compromiso y… bueno, y poco más. En este contexto encontraríamos 4 grandes grupos:
Mujeres con las que nunca tendría sexo
En este grupo entran aquellas mujeres ante las que bajo ningún concepto estaría dispuesto a tener contacto sexual alguno. En esencia me refiero a menores de edad, demasiado mayores (personalmente las ancianas no me excitan), mujeres con discapacidades intelectuales severas o simplemente personas demasiado gilipollas.
Mujeres con las que no me importaría tener sexo
Aquí os encontráis la inmensa mayoría de la población a excepción de las arriba mencionadas. La cosa es que yo no tengo mitificado el sexo, no necesito sentir mariposas en el estómago ni conseguir conexiones especiales, si donde tenemos que conectar es en la cama. Entonces, sí tú y yo nos encontramos, ambos estamos sin compromiso y además tenemos ganas de juerga entra las piernas ¿por qué no hacerlo? no espero amor eterno ni una gran amistad, se trata sólo de pasarlo bien un rato y luego el tiempo dirá. Así pues, si no eres demasiado fea o demasiado gilipollas (es más, si eres real y objetivamente fea como el culo de un orko pero eres simpática o ingeniosa, seguro que consigo encontrar algo bonito en ti que me excite) … ¿por qué no intentarlo? quizás no seamos el prototipo ideal el uno del otro pero oye, que en ocasiones te pones y donde menos te lo esperas te encuentras un polvazo. Además, esa conexión puede llegar luego.
Mujeres con las que me gustaría tener sexo
Aquí hay un pequeño grupo que realmente me gustan sexualmente hablando. Mujeres que tienen un algo especial que me resulta poderosamente atractivo: quizás su inteligencia, su saber hacer para mirar y derretir, el conocimiento de su propia erótica y de como manejarla, el talento para provocar mi intelecto en una disputa de ingenio… pueden ser muchas cosas pero la cuestión es que hay mujeres que me resultan excitantes y no puedo evitar imaginar cómo sería el sexo con ellas, aunque como he dicho, son sólo un pequeño grupo ya que para llegar a este punto sí que necesito algún tipo de conexión con la persona y esto implica por lo general tiempo para poder tenerla.
Mujeres con las que quiero tener sexo
Mujeres con las que realmente, de forma activa y premeditada, quiero tener sexo, mujeres con las que hago el esfuerzo necesario para seducir y poder así meterme entre sus sábanas. Este sí que es un grupo selecto ya que desde hace mucho solo hay una en él.
Yo diría que en mayor o menor medida, la mayoría de los hombres nos movemos en estos baremos. La cuestión que tiene que quedar clara es que el que no me importe tener sexo contigo o incluso lo desee, no significa necesariamente que esté tratando de conseguirlo. El sexo es una parte más de la vida como la amistad y la compañía. Ni unos dependen de los otros ni son excluyentes y como diría el bueno de DosDe, si me gustas yo igual te lo propongo y si no te apetece, oye, sin dramas, no pasa nada, seguimos disfrutando de lo que estábamos haciendo, que si he llegado a proponerte algo es seguro que lo estábamos pasando bien.
Resumiendo todo esto, podría tener sexo casi con cualquier mujer del mundo y no por ser despreocupado, tener carencias de gusto al respecto o ligereza en mis decisiones, sino porque tengo el don de encontrar algo interesante en casi toda la gente y cada persona es un mundo por explorar lleno de sorpresa. Hay mil razones para follar contigo, además, tened en cuenta que un cuerpo llama la atención pero una mente excita y esa mente, puede estar en cualquier lado.